Aunque no hables, entiendo tu silencio.
Tus ojos taciturnos con un dejo intenso
de tus penas, algunas muy profundas
quieren llorar las lágrimas perdidas.
Pero piensa que hay un mañana. Y aunque
no lo quieras saldrá el sol aunque a veces
se oculte tras las nubes. Vendrán las estaciones,
las aves se marcharán, florecerán los campos,
y al ritmo del viento cantarán a la vida.
Nacerán unos, morirán otros. Pasarán como
partículas de arena los días y los años.
Y estas líneas se transformarán en nada…
Habla entonces con El y encontrarás el camino….
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